Transeúntes

Yo mismo, a veces, camino junto a alguno de ellos y le pregunto
¿de dónde venís anónimo habitante de la ciudad anónima?
¿a dónde vas solitario personaje de la vereda solitaria?
Pero es en vano. Ellos no contestan, son meros transeúntes perdidos.
Santiago Figueroa